Las 40 mil piezas de las reservas del Museo del Banco Central de Quito se hallan bajo el cuidado de Estelina Quilatoa, indígena otavaleña, licenciada en antropología de la Universidad Politécnica Salesiana y máster en bienes culturales de la misma institución. Su larga trayectoria laboral en el Banco Central le ha permitido familiarizarse ampliamente con las piezas, a través de su estudio, restauración, y exhibición.
Las piezas de la reserva están clasificadas por periodos (Formativo, Desarrollo Regional, Integración e Inca), y se procura mantener condiciones atmosféricas óptimas de cara a su conservación.
Quinatoa está actualmente trabajando en un proyecto de digitalización de diseños de platos precolombinos asociados a la cultura Carchi (Capulí, Tuza y Piartal). “Me diferencio con un arqueólogo porque él conoce la zona en la que cavó; yo, en cambio, tengo la suerte de manipular y conocer las características de cualquier objeto”.

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